lunes, 16 de noviembre de 2009

Una gota y ya te convertiste en un charquito de esperanzas. Gota tras gota, ilusión tras ilusión, besos robados en aquella oscura habitación. Manchadas paredes llenas de recuerdos. Risas, discusiones, amor desenfrenado...


Últimos destellos de un día lluvioso, manchado de sucias gotas escupidas desde arriba, ella lo interpretó como una señal. Un día tan triste sólo significaría una cosa, una señal, la señal de su último día, su último beso, su última caricia, sus últimos abrazos junto a él, se le iva la vida.. roza sus dedos contra sus suaves labios, pero no son los de él. Se desvanece, sus latidos se aceleran, un amor de infarto...


Todo no es eterno..